FAENA EN CANALPOR: Evaristo Benitez Castro
El necesario equilibrio para sobrevivir.
El ambiente político y / o en el servicio público mexicano, tiene peculiaridades que algunas de ellas lindan con el salvajismo como intentaré ejemplificar en el contexto de la salida de la titular, ayer, de la Secretaría de Educación del gobierno de Tamaulipas Lucía Aimé Castillo Pastor y la entrada del sustituto Miguel Ángel Valdés García.
Mi hija menor fue compañera de Lucía Aimé en la primaria Leona Vicario de la capital de Tamaulipas; en ese entorno mi familia fue testigo de una dura prueba pues Lucía padeció de una leucemia que si bien pudieron curar ello les significó años de lucha entre hospitales, medicinas y la solidaridad de la sociedad victorense gracias a las relaciones de sus padres y abuelos.
Quizá por ello y ya curada Lucía Aimé sus padres integraron una asociación civil para apoyar a enfermos y familiares que pasaran por similares trances y obstáculos.
Años más tarde me enteré de las actividades profesionales y políticas de Lucía Aimé; sin distingos colaboró en cargos de dirigencia partidista y con gobiernos priístas, panistas y ahora con el partido de moda, MORENA.
Quienes ya no nos chupamos el dedo meñique (por el tremendo problema de artritis), tenemos claro que para que un político (a) arribe a cargos importantes con la escalera de varios partidos políticos en variadas y contradictorias circunstancias, debe tener una mínima dosis de maldad en el contexto de la política mexicana y desde luego tamaulipeca.
Bajo dicho anterior supuesto, en lo particular no tengo duda de que gracias a esas relaciones que especulo aún conserva Lucía Aimé, es que sus amigos (as) no la dejarán desprotegida y pronto la veremos en otra posición de poder.
Salvo para los miopes, su servidor tiene la certeza de que, éste raund en particular, lo gana el líder de la sección XXX del SNTE Arnulfo Rodríguez Treviño, tras dos años de lucha intestina por los espacios de poder al interior de la Secretaría de Educación tamaulipeca.
Al respecto si YO fuera amigo del maestro Arnulfo lo invitaría a reflexionar que….
—–En razón de nuestro ciclos biológicos y salvo una enfermedad que agobie en el futuro a Lucía Aimé, sería recomendable que el maestro con casi ochenta años y Lucía con menos de 50 años de vida, decía sería recomendable que don Arnulfo se blinde políticamente de las tranzas-patrón-sindicato de maestros, en tanto que a la señorita Lucía Aimé, pronto la veremos revirar en el terreno de la revancha.
—–La Secretaría de Educación en Tamaulipas, junto con la Secretaría de Salud, son escenarios donde los aviadores y el tráfico de influencias marcan los derroteros a seguir por una elemental razón: manejan los mejores presupuestos en la administración pública.
Ahora bien en cuanto al reemplazo de Lucía Aimé, el doctor Miguel Ángel Valdés García, la reflexión sería…. ¿Tiene, en cuanto a su bagaje técnico y político, las habilidades suficientes para torear al sindicato de maestros, a la corrupción interna y a los líderes y sus periodistas acelerados que ya buscan candidato a gobernador de Tamaulipas?.
De eso hablaremos mañana, el Señor por Delante.
Por hoy le ratifico estimado amigo… TODOS BUSCAMOS EL NECESARIO EQUILIBRIO PARA SOBREVIVIR en la competitiva sociedad moderna. Es así que para los poco o mucho pendejos, el hambre no tiene distingos.
