La alcaldesa de Tampico cumple promesa a pensionados; reconocen sensibilidad del gobierno actual
Por Agustin Peña Cruz | Noticiaspc.com.mx |
Tampico, Tamps.- En un acto que marcó la diferencia frente a administraciones pasadas, la presidenta municipal de Tampico, Mónica Villarreal Anaya, fue reconocida por la Unión de Pensionados y Jubilados del municipio tras cumplir su palabra durante la celebración del
Día de las Madres, realizada el pasado 15 de mayo en el salón Mesanini de la Expo Tampico.
Durante el evento, Villarreal Anaya entregó múltiples obsequios, incluidos cuatro pantallas de gran formato, cumpliendo así lo previamente acordado con el gremio. “La presidenta estuvo con todo. Lo que le habíamos pedido, lo cumplió”, expresó Servando Mata Trejo, presidente de la Unión de Pensionados y Jubilados de Tampico, quien destacó la presencia y compromiso de la 
alcaldesa en la emotiva celebración.
Sin embargo, no todo fue fiesta. Mata señaló que, si bien algunos pensionados recibieron un incremento económico en esta primera quincena de mayo, el ajuste aún no alcanza el monto del salario mínimo en varios casos.
“A unos no les salió nada más que un pequeño aumento”, explicó. Ante esta situación, el líder sindical anunció que se reunirá este lunes con el secretario Héctor Villalpando, quien previamente había asegurado que el aumento ya estaba autorizado y se reflejaría en esta quincena.
El presidente de la Unión también aprovechó la ocasión para contrastar la actitud de la administración actual con la anterior, encabezada por Jesús “Chucho” Nader, a la que acusó de falta de sensibilidad. “Con Chucho Nader fuimos completamente ignorados. No mostró el más mínimo grado de empatía con nosotros”, lamentó Mata.
La entrega del aumento, aunque tardía —pues se esperaba para el pasado 30 de abril—, fue recibida como una “grata sorpresa” por parte de los beneficiarios, quienes ven en el nuevo gobierno municipal una disposición más humana y cercana a las necesidades de los adultos mayores.
Por lo que el evento del Día de las Madres no solo sirvió como espacio de convivencia, sino también como un momento simbólico en el que se reafirmó el compromiso de la administración actual con uno de los sectores más vulnerables de la población. Con ello, la alcaldesa Villarreal Anaya parece consolidar una gestión más empática, en contraposición al distanciamiento que marcó a sus antecesores.