
Juan Antonio Montoya Báez
Los chifladitos
Los actuales presidentes municipales se quedaron cortos, muy lejos de poder cumplir sus promesas, es más ni siquiera pueden igualar el trabajo de sus antecesores en algunos municipios, donde los electores todavía se cuestionan el motivo por el cual sufragaron por ellos.
En Matamoros, por ejemplo, decidieron llevarse por el canto de las sirenas y en lugar de apostar por la experiencia de la ex alcaldesa panista LETICIA SALAZAR, prefirieron el perfil del jovial candidato BETO GRANADOS.
Pero, todo estuvo mal desde el principio, el propio Morena se equivocó al seleccionar al candidato a la alcaldía, pues había muchas señales que indicaban que no deberían tomarlo en cuenta para ponerlo en la boleta.
Primero que nada, fue un factor de desunión, el conflicto que provocó su incursión en el interior de Morena. Fue notable su pleito con el ex alcalde MARIO “La Borrega” LÓPEZ quien no se escondió ante nadie, por lo que tuvieron que pactar en lo oscurito para lanzarlo como su aspirante.
Otro factor, fue su evidente ineptitud, BETO GRANADOS en su calidad de diputado local no hizo un gran trabajo, por el contrario, dejó mucho que desear con una pésima faena legislativo.
Cuando le pidieron presentar alguna iniciativa, se dio el caso que ni siquiera pudo leer la propuesta, lo que nos da idea de su precaria preparación académica, sin embargo, pertenece al mismo grupo del Secretario del Trabajo, LUIS GERARDO ILLOLDI REYES. Las similitudes son muchas, ambos con carreras meteóricas, son sujetos ambiciosos, zalameros que están perdidos en la banalidad.
BETO GRANADOS encabeza una administración polémica, con pocas acciones plausibles, pero eso si caracterizada por los constantes escándalos, que en otra administración y con otro partido hubieran sido suficientes para pedir su licencia.
Por ejemplo, su primera acción de gobierno fue nombrar a su madre, como la mujer más distinguida de Matamoros, lo cual no se le discute, quizá tenía los méritos y trabajo para que se le diera tal reconocimiento, pero la pregunta de siempre, porque hasta ahora y no se le dio en otra parte de su vida.
También tuvo el dudoso privilegio de ser el primer alcalde y político de Morena al que fue despojado de su Visa por las autoridades de los Estados Unidos debido a las investigaciones internas y antecedentes sospechosos que se realizan en el vecino país.
BETO fue interrogado por espacio de varias horas y es fecha que todavía no se recupera del susto, mucho menos le regresaron su Visa que asegura sigue guardada en su casa, en otra de sus tantas mentiras.
También timó cuando aseguraba que tenía un título profesional que no aparecía en el registro nacional, pero de la nada le apareció una licenciatura en administración de empresas de una escuela patito. Ojalá y diera el tip a miles de mexicanos que buscan un título profesional y no tienen manera de encontrar una institución que no sea fraudulenta.
Los fraudes están a la orden del día, muchas instituciones ofrecen títulos con cursos de meses o examen de conocimiento, pero se exponen a un fraude y quizá a obtener un documento que no es avalado por la SEP y nadie quiere perder su dinero.
Sin embargo, el alcalde BETO si tuvo la suerte de que no lo timarán, compró un título, con el que ahora él estafa a los ciudadanos al presentarse como en la serie de los chifladitos “díganme licenciado”.
BETO es tan chiquito que se la pasa criticando a la “Borrega” LÓPEZ para que lo olviden, con el auxilio de su grupo en ciudad Victoria.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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EL PATINADERO
LIC. JUAN ANTONIO MONTOYA BAEZ
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