«FORO MIGRANTE EN EL CONGRESO DE TAMAULIPAS»

Eduardo Pacheco
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Columna Opinión Económica y Migratoria.

 

Dr. Jorge A. Lera Mejía.

La situación migratoria en Tamaulipas durante 2025 ha estado marcada por el retorno masivo de migrantes, las deportaciones voluntarias y la disminución de remesas, fenómenos que afectan directamente la economía estatal, el gasto en consumo y las condiciones sociales de miles de familias.

Para atender este fenómeno migratorio por territorio estatal, esta semana se organizo un Foro Estatal de Migración, invitados por el Congreso de Tamaulipas y el Instituto Tamaulipeco para los Migrantes, donde analizaron estos impactos y debatieron rutas de atención humanista.

Dentro de los asistentes, se registró la visita del dirigente de migrantes en Houston Texas, Jay de León, así como del académico del Colegio de la Frontera Norte en Matamoros, Dr. Óscar Misael Hernández, además, en forma virtual participó el tamaulipeco Rafael Pulido Lara, representando a los migrantes mexicanos desde España.

Migración, deportaciones y remesas en Tamaulipas

En el primer semestre de 2025, Tamaulipas recibió más de 20,000 migrantes repatriados, con Matamoros como principal punto de retorno.

Aunque el volumen de deportaciones cayó cerca de 30% frente a 2024, la llegada constante de tamaulipecos y otros migrantes ha elevado la demanda de servicios y la presión laboral en la frontera. A esto se suma una tendencia de deportaciones voluntarias, impulsadas por la incertidumbre y el endurecimiento de las políticas migratorias estadounidenses.

Las remesas hacia Tamaulipas han sufrido una caída notable en 2025—alrededor de 5-7% según estimaciones financieras—debido a la disminución de empleos y movilidad de migrantes en Estados Unidos, sumado al fortalecimiento del peso frente al dólar, que reduce el valor real recibido por las familias tamaulipecas.

Más de 230 mil familias dependen de estos flujos; la zona sur (Tampico, Madero y Altamira) concentra la mayor parte de los hogares beneficiados por remesas.

La menor captación de remesas ya está afectando el gasto en consumo, la solvencia de comercios locales y la capacidad de inversión familiar.

La política de cierre de fronteras y restricciones para nuevas migraciones ha reducido la migración hacia Estados Unidos y aumentado la competencia laboral interna, presionando el desempleo y los salarios.

El futuro de las remesas luce incierto para Tamaulipas, con perspectivas de estabilización a partir de 2027, pero sin repuntes significativos mientras persistan políticas restrictivas y la desaceleración económica estadounidense.

El foro estatal subrayó la necesidad de un enfoque humanista:

  • Fortalecer la atención, protección y reintegración social y laboral de los migrantes repatriados.
  • Coordinación interinstitucional entre gobiernos estatal, municipal y organizaciones civiles para atender integralmente a los migrantes y sus familias.
  • Mantener y ampliar los programas de acompañamiento psicosocial y acceso a servicios de salud, educación y empleo.

Las ponencias coincidieron en que la migración y las remesas seguirán siendo pilares para la economía tamaulipeca y que urge avanzar hacia políticas públicas que sitúen en el centro la dignidad y el bienestar de las personas en movilidad.

Juan José Rodríguez Alvarado, director del Instituto Tamaulipeco para los Migrantes, destacó que “la migración no se puede reprimir ni detener, ya que la llevamos en la sangre, pero sí podemos mejorar las condiciones en que migraron nuestros familiares”. Subrayó el compromiso de Tamaulipas de estar siempre al lado de sus paisanos y generar políticas sensibles, protegiendo tanto a migrantes como a sus familias a través del fortalecimiento institucional y el diálogo social.

El gobernador Américo Villarreal Anaya ha reiterado que Tamaulipas está preparado para enfrentar los cambios migratorios con un enfoque humanista, justicia social e inclusión, sin importar la nacionalidad o condición migratoria. Afirma que su gobierno apuesta por una migración segura, ordenada y responsable, que garantice el retorno digno y convierta a los migrantes en actores del desarrollo estatal.

Por último, las autoridades de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) y destacados académicos han realizado estudios y propuestas sobre migración y remesas estatales, aportando análisis de alto impacto social.

Desde la rectoría, Dámaso Anaya Alvarado respalda el modelo humanista impulsado por el Gobierno de Tamaulipas, resaltando la importancia de incluir a jóvenes y familias migrantes en el diseño de políticas públicas, y enfatizando la protección de los derechos humanos y la dignidad de los retornados.

El suscrito, Jorge Lera, he reiterado desde mis investigaciones, proponer el aprovechamiento de las remesas de manera estratégica para generar proyectos productivos locales y fortalecer la inclusión financiera de migrantes y sus familias.

Desde mi pasada Tesis doctoral, he recomendado recuperar programas como el 3×1, fomentar mecanismos de integración y crear modelos de inserción laboral y social que conviertan a los migrantes en un motor de desarrollo local, evitando su marginación económica.

Con mis aportaciones coincidimos en que Tamaulipas enfrenta el reto de transformar la migración en una oportunidad de bienestar, justicia y crecimiento productivo…

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