EL FRANCOTIRADOR
Por Óscar Jiménez
Los golpes internos en el PRI están a la orden del día.
Las quejas constantes son en contra del Comité Directivo Estatal de este partido en Tamaulipas.
Como ejemplo está el municipio de González. Ahí, quien fuera regidor en el 2013 Óscar Bernal Mayorga, protestó porque su partido se ha convertido prácticamente en un Club de Amigos.
Óscar Bernal fue, incluso, en aquellos años el coordinador de síndicos y regidores del PRI en todo el estado de Tamaulipas, y ahora dice que no le hacen caso a la militancia.
Escribió que “en ocasiones me pongo a pensar que estaría bien apuntarse para la candidatura a diputado (local 2019), pero luego me acuerdo que siempre en la cúpula escogen a los que les conviene y se me pasa…jajaja”
Además, Bernal Mayorga dice que “sigue aferrándose la Mafia del Poder (como) dijera el Presidente (AMLO)…”
Y bajo esa óptica personal del exregidor se lanza con todo sobre la dirigencia estatal de su partido:
“Queda más que claro que al PRI en Tamaulipas sólo le interesa participar por las diputaciones plurinominales, esta dirigencia (estatal) no le interesa el recuperar espacios en la vía representativa (votos en las urnas)”.
Y el texto sigue diciendo que “NUNCA SE RAJAN DE HACER LO MISMO” “vamos a esperar esa lista (de candidatos plurinominales) para tomar serias decisiones”.
Huelga decir que estos pequeños textos recibieron el apoyo de algunos de sus compañeros de partido, que comparten la misma visión sobre lo que presuntamente sucede en el PRI Estatal y “la pelea” por las candidatos plurinominales.
Y aunque el municipio de González es vecino de Altamira, pertenece al distrito 16 con cabecera en Xicoténcatl. Pero ya que andamos por ese rumbo les digo que en Altamira convergen dos distritos el 18 (Altamira y Aldama) y el 19 que le llaman Miramar porque lo conforman Altamira y Madero por correr en los núcleos poblacionales cercanos a la playa del mismo nombre.
¿Por qué le menciono esto último? Porque llama la atención la postura de Carlos González Toral, secretario de operación política, que asume una actitud crítica, pero se cura en salud diciendo que por esos comentarios “se le irán encima como jauría”.
Subrayo que él tiene el derecho de opinar en lo que cree, pero debería dejar a la otra parte también ejercer la opinión. No curarse en salud diciendo que lo criticarán como desacreditando desde antes a “los otros”. Las opiniones deben ir en ambas direcciones y defender posturas.
Pero más allá de ello, Carlos González Toral, un joven político altamirense que tenía futuro pero que se descarriló en el pasado proceso electoral municipal está en un estado de confort, precisamente al que alude Óscar Bernal González al decir “La Mafia del Poder” en el PRI Tamaulipas.
González Toral fue el candidato del tricolor a la presidencia municipal de Altamira (2018) y perdió estrepitosamente, y después quiso obligar a regidores del PRI a que pagaran sueldos a un amigo suyo aún y cuando el compromiso político fue de él y no de los priístas que tienen una regiduría en ese municipio.
Además, se convirtió el año pasado en miembro de número del Club de Amigos en el que se convirtió el CDE del PRI Tamaulipas y al que hace alusión Óscar Bernal Mayorga.
Varios de los candidatos perdedores en las pasadas elecciones concurrentes (federales y locales) al no tener chamba en sus municipios porque el PRI lo perdió casi todo en las urnas, se fueron a ocupar carteras con sueldos ¿suculentos? en el comité directivo estatal del PRI Tamaulipas.
No se quedaron a hacer talacha política de campo y no dejaron esos espacios del CDE a nuevos cuadros políticos, pero eso sí, ahora son muy valientes desde sus escritorios en las oficinas estatales del tricolor hasta donde les llega el buen sueldo. En fin.
MAQUIAVELITO
…Para los que no viven en Ciudad Victoria, Tamaulipas, el nombre de El Padre Gato no les dice nada. Pero para los que residimos en la capital tamaulipeca sabemos que fue un buen hombre.
Es cierto, fue un hombre de contrastes, pero benefactor de muchos y hombre de acción en su iglesia católica.
Creo que, mucho antes que Ricardo Arjona, El Padre Gato entendió que “Jesús hermanos míos es Verbo, no Sustantivo”.
Y es que el sacerdote José Rubén Robles Carrillo (El Padre Gato) supo desde que abrazó su misión eclesiástica que “a Jesús le gusta que actuemos no que hablemos”.
Murió José Rubén Robles Carrillo (El Padre Gato) en la ciudad de Fresnillo, Zacatecas.
Descansa en paz Padre Gato…cumpliste cabalmente con tu misión en esta vida…mereces ir con Dios.