PALACIO
Por Mario Díaz
Arden Sinaloa, Michoacán y Tabasco
-Sicarios asesinan a balazos a agente federal en Culiacán
-Atacan a soldados con drones y minas en Michoacán
-Escisión del grupo “La Barredora” tiene en jaque a Tabasco
- Matamoros, Tamaulipas.-La violencia extrema que registran los estados de Sinaloa, Michoacán y Tabasco serían ejemplos del fracaso del gobierno de la Cuarta Transformación para devolver la tranquilidad a los ciudadanos de esas entidades federativas.
Los operativos conjuntos de fuerzas policiales estatales y federales no han logrado ni tan siquiera inhibir la actividad delictiva de los distintos cárteles de la droga que se disputan plazas y territorios en los puntos estratégicos de la república mexicana.
La capacidad de respuesta de los individuos fuera de la ley que enfrentan, incluso, a los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional y de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, pone en evidencia la eficacia de la 4T para enfrentar ese flagelo.
El asesinato de un agente de la SSyPC en Culiacán, Sinaloa, a manos de sicarios al servicio de “Los Chapitos” representa un reto para el super secretario OMAR GARCÍA HARFUCH, quien, hasta el momento, se ha concretado a manifestar que el crimen no quedará en la impunidad.
Asimismo, la muerte de dos soldados del Ejército Mexicano al intentar desactivar una mina terrestre y la agresión con artefactos explosivos transportados por drones, en hechos distintos, es una muestra clara que los grupos delincuenciales no temen enfrentarse a las fuerzas militares.
En Tabasco, allá en el sureste mexicano, no cesan las balaceras, quema de autos y ataques a tiendas de conveniencia como consecuencia de la rivalidad entre grupos delictivos y los enfrentamientos de estos en contra de las fuerzas del orden.
La inseguridad que priva en las entidades antes mencionadas se ha recrudecido en los últimos días, sin que quiera decir que son casos focalizados y que la actividad violenta no se registra en otras latitudes del territorio nacional.
La triste realidad para México y los mexicanos es que en la nueva centuria ni los gobiernos panistas ni el priísta ni tampoco el morenista han logrado implementar acciones efectivas para, al menos, inhibir, la actividad delincuencial del crimen organizado.
Por el contrario, con estrategias militares, uso de vehículos blindados y artillados, drones, minas terrestres y ataques aéreos con artefactos explosivos, los sicarios no temen a las fuerzas federales de apoyo ni tampoco a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y su facultad constitucional para tareas de investigación.
Informes oficiales indican que las fuerzas militares que operan en el estado de Michoacán han desactivado 19 artefactos explosivos y asegurado 12 kilogramos de pólvora aluminizada, lo que evidencia la potente capacidad de fuego de la delincuencia organizada.
En el sureste mexicano, los tabasqueños responsabilizan al ahora coordinador morenista en el Senado de la República, ADÁN AUGUSTO HERNÁNDEZ, como el responsable de la violencia que se registra en esa entidad federativa.
Aseguran que es un secreto a voces que autorizó la creación del grupo “La Barredora” que comandaba el entonces secretario estatal de seguridad pública, HERNÁN BERMÚDEZ REQUENA, quien fuera sustituido al implementarse el operativo Fuerzas de Tarea Tabasco Seguro a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional.
La escisión de “La Barredora” es la causa que mantiene sumida en la violencia e inseguridad extrema en esa región de la república mexicana, sin que las fuerzas militares hayan logrado su objetivo de desactivar las distintas células delictivas.
Ante el incremento de la violencia y las fiestas decembrinas, la senadora morenista por Sinaloa, IMELDA CASTRO CASTRO, polarizó la opinión pública al solicitar a los grupos criminales una “tregua navideña” para que los sinaloenses pudieran celebrar en paz las fiestas navideñas.
Sin embargo, el secretario estatal de Seguridad Pública, GERARDO MÉRIDA SÁNCHEZ, rechazó de manera contundente el llamado de paz de la legisladora en la Cámara Alta del Congreso de la Unión y, en cambio, subrayó el compromiso de la autoridad estatal de no ceder ante las actividades de los grupos criminales.
No obstante, cabe señalar que, a pesar de la dualidad de criterios, algunos sectores de la sociedad civil y representantes religiosos se han manifestado en favor de fomentar la paz durante las celebraciones propias del mes de diciembre.
Mientras tanto, la presidenta CLAUDIA SHEINBAUM PARDO, ha programado una reunión de trabajo con tema de seguridad en Mazatlán y, posteriormente, reanudar las sesiones con los gobernadores para analizar la problemática en materia de seguridad pública.
Para mala fortuna de gobierno y gobernados, prácticamente han sido nulos los resultados de las reuniones tempraneras con el gabinete de seguridad que implementó a lo largo de su gobierno el ex presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, programa de trabajo que seguirá al pie de la letra su sucesora.
Ni hablar.
DESDE EL BALCÓN:
I.-A juzgar por lo que se observa, tal parece que la despedida del presente año y la llegada de 2025 será matizada por la violencia extrema que se registra en distintas regiones del país, pero que la 4T insiste en minimizar con el argumento de que se trata de situaciones focalizadas.
¿Cómo la ve?
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx