CEDES, el general avestruz

Eduardo Pacheco
7 Min Read
Interiores
Por Carlos López Arriaga
CEDES, el general avestruz
 
Cd. Victoria, Tam.- El general JUAN ANTONIO SÁNCHEZ RUIZ, hombre feliz, queretano de origen, subsecretario de Seguridad y autoridad máxima de prisiones en Tamaulipas, sorprende a la opinión pública al decir que no hay celulares en las instituciones penitenciarias a su cargo.
¿Cuáles celulares?, ¿extorsión desde nuestros penales?, ¿qué es eso?… no, no, no, señores reporteros, desde que el caballero llegó a su cargo, no se ha visto un aparato así en sus dominios.
Ello, pese a la narrativa noticiosa que dice todo lo contrario. Y no son mentiras de periodistas. Acaso el declarante deba leer el comunicado oficial publicado el primero de diciembre por el gobierno de la República que (como seguramente sabe) preside la doctora CLAUDIA SHEINBAUM.
Reporte boletinado por la SSPC a cargo de OMAR GARCÍA HARFUCH, que dice lo siguiente:
-“En el marco de la Estrategia Nacional contra la Extorsión, en el estado de Tamaulipas, elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), Secretaría de Marina (Semar), Fiscalía General de la República (FGR) y Guardia Nacional (GN), así como la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en coordinación con la Fiscalía General d e Justicia, la Unidad Especializada en Combate al Secuestro (UECS), la Unidad de Antisecuestro y Antiextorsión (UAA) y la Secretaría de Seguridad Pública del estado, realizaron trabajos de inteligencia que permitieron identificar y desarticular una célula delictiva dedicada a la extorsión, lo que derivó en la solicitud y cumplimiento de órdenes de aprehensión contra 12 de sus integrantes.” (https://tinyl.co/47lv).
TODO UN CASO
Ello, aunque la versión cómoda del subsecretario se esmere tanto en añadir atenuantes que parecería minimizar el caso y cantar el clásico “yo no fui”. Es decir, mandar un mensaje claro (no se a quienes) de que el caballero no metió las manos, pues el tema “salió en las noticias”, “solo dimos las facilidades”, la FGR “entró a cumplimentar las órdenes” y “fue todo”.
Así de simple. El hombre ni las manos metió (¿le interesa que esto se sepa?), solamente se abrió al impetuoso arribo de las autoridades federales. Y, bueno, pasadas unas semanas, ahora insiste en que bajo su gestión no han visto un solo celular.
Incluso se atreve a desafiar a la mismísima FGR al deslizar el dicho de: “habría que preguntarle a la Fiscalía sobre mayores detalles de lo encontrado “, “bueno sería que hubieran presentado las pruebas” y “sí hay algunas denuncias que nos las hagan llegar”.
Muy bien, que todo Reynosa se entere, el general avestruz se lava las manos y aclara que nada tuvo que ver en el asunto pues nomás abrió la puerta a sus superiores: SSPC, SEMAR, Defensa, GN, FGR y UIF.
Es decir, el combinado de fuerzas que ingresó al penal de Reynosa y cumplimentó nuevas órdenes de arresto contra 12 individuos que ya estaban presos por otros delitos.
El Gobierno de la República precisó que el operativo (1) fue resultado de una investigación donde (2) habían detectado actividades de una célula que realizaba llamadas extorsivas, sobre la cual (3) identificaron el perfil de las víctimas, grupos vulnerables, adultos mayores y adolescentes, amenazados (4) desde 80 números telefónicos y administrando el botín (5) en más de 70 cuentas bancarias (https://tinyl.co/47lv).
¿NO PASA NADA?
Así lo informaron los medios tamaulipecos y también los nacionales a principios de mes. Me ocupé de ello el miércoles 3 de diciembre (Interiores, “Extorsión desde la bartolina”, https://tinyl.co/47iL), añadiendo algunos datos contextuales, pepenados de aquí y allá.
En febrero del presente 2025 se reportaba que Tamaulipas estaría entre las entidades con mayor índice de extorsión telefónica y secuestros virtuales, en su mayoría, desde reclusorios, junto con Jalisco, Oaxaca, Estado de México, Veracruz, Chiapas y Guerrero.
De marzo viene otro reporte. El problema no es privativo de los penales fronterizos pues el de Altamira genera hasta seis millones de pesos mensuales por extorsiones telefónicas y cobros a los internos “por bienes y servicios”.
En abril del presente año, otro dato. Medio millar de extorsiones telefónicas contabilizadas en Tamaulipas entre 2024 y 2025, de las cuales se identificaron alrededor de 800 números usados para fines delictivos, con un daño material de 50 mil pesos por víctima, en promedio.
Y en julio un caso ejemplar. Dos jóvenes de Quintana Roo obligados a esconderse en un hotel, tras la llamada de un sujeto que se dijo miembro de un grupo criminal y los amenazó con una muerte violenta si su madre no le depositaba 300 mil pesos. El gobierno actuó a tiempo y los liberó sin daño ni pago alguno. La llamada había salido del penal de Altamira, Tamaulipas.
Ya para rematar, pregunté en la referida columna del día tres (y sigo preguntando ahora):
 -“¿A qué autoridad podríamos responsabilizar de que dicha célula haya operado con tanta libertad?”, para responder enseguida: -“En principio, directivos y guardias del presidio. Pero más arriba también.” (https://tinyl.co/47nF).
Más arriba, en efecto, aunque ahora digan que no pasa nada. En fin, por el asueto navideño, esta columna entra en receso para retornar el lunes 5 de enero del 2026. Felices fiestas y mejor año. Como siempre, gracias por leer.
TAGGED:
Share This Article