Claudia apoya a Tamaulipas
-Excelente relación con Américo
-Urge autopista exclusiva para automóviles
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Raúl Hernández Moreno
3-octubre-2024
Si la presidenta Claudia Sheinbaum le cumple a Tamaulipas, a nuestra entidad le va a ir muy bien, porque en su primer discurso presidencial prometió ampliar los puertos de Altamira y Matamoros, la ampliación de la carretera Tuxpan-Tampico y el tren de pasajeros Nuevo Laredo-México.
En el siglo XIX el puerto de Matamoros fue muy importante. Ahí se libró en 1866, una batalla entre el ejército francés y el mexicano, durante la cual, curiosamente, tropas estadounidenses integradas especialmente por soldados negros, participaron a favor de los nuestros.
En el caso concreto del tren hay nostálgicos que añoran los tiempos en que se viajaba en este medio de transporte y en todo caso sería una nueva opción para los viajeros. Las vías ferroviarias tardarán cinco años en construirse.
En las elecciones del 2 de junio, Sheinbaum recibió una votación histórica de más de un millón de votos en Tamaulipas. Los tamaulipecos confiaron en ella y en el gobernador Américo Villarreal que generó las condiciones adecuadas para que pudiera obtenerse está votación sin precedentes.
Hay excelentes relaciones entre Claudia y Américo y esto debe contribuir a que a Tamaulipas le vaya bien.
Por otro lado, el cabildo de Nuevo Laredo aprobó un punto de acuerdo para hacerle un exhorto a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para que solucione los diarios congestionamientos vehiculares que se presentan en la autopista Nuevo Laredo-Monterrey.
Estos congestionamientos se presentan desde hace varios años, pero en los últimos tres o cuatro meses hicieron crisis y las largas filas se hacen todos los días. Ya no conviene circular por la autopista, es más rápida la carretera libre.
En condiciones normales viajar de Nuevo Laredo al centro de Monterrey se hace en dos horas y entre 15 y 30 minutos; desde hace meses, el mismo trayecto se hace entre cuatro y seis horas, y hasta más.
Desde hace 7 u 8 años, constantemente está en reparación algún tramo de la carretera, lo que nos tiene convencido de que son obras chambonas, de mala calidad, de otra manera serían durables.
Pero, además, los trabajos se realizan a modo de tortuga reumática, muy lentos, cuando se debería de trabajar con tres turnos.
Basta circular en San Antonio o en Austin y ver cómo se trabaja en tramos de 25 a 40 kilómetros y hay decenas, y hasta centenas, de maquinaria pesada y cientos de obreros. Ahí sí hay calidad y ganas de hacer las cosas bien.
El tráfico comercial por la autopista se ha incrementado mucho en los últimos años y ya se hace necesario construir una nueva autopista que sea exclusiva para vehículos ligeros. Es cierto que los choferes de trailers tienen mucha experiencia en el manejo, el problema es que se les obliga a trabajar jornadas diarias de 12, 15 horas y para mantenerse activos, muchos recurren a medicamentos controlados que literalmente los convierte en zombis y por eso se generan los accidentes.
Con una autopista exclusiva para vehículos ligeros, los automovilistas se sentirían más seguros.
Las nuevas carreteras en México deben incluir zonas de descanso, donde los traileros y los automovilistas puedan llegar a descansar en sus propias unidades. Que haya patrullas, máquinas expendedoras de alimentos y bebidas, baños limpios, mesas y bancas para comer, para descansar.