AL VUELO
Por Pegaso

-Felipillo, hay que volver a reunirnos con la gente de El Yunque para modificar nuestras estrategias. Parece que la campaña de desprestigio contra López no va tan bien como lo habíamos planeado.

-Ya te decía yo, Chente, que mientras más lo atacáramos más grande lo íbamos a hacer.

-Sí, pero Martita y yo pensábamos que con dos o tres apretones, como los aguacates, iba a estar listo para dejar la Presidencia de la República y del Repúblico.

-Tendremos que citar a reunión urgente con El Yunque para ver qué más podemos hacer.

-Sí, mira. Ya le dijimos que está enfermo, que está loco, que es un peligro, que tiene en su gabinete a todos los corruptos del PRI, que Evo Morales es narcotraficantes y mil cosas más, pero no hemos logrado bajar su popularidad.

-Bueno, déjame hacer unas llamadas para la reunión con El Yunque y yo te aviso.

(…)

-¿Bueno?¿Sí? ¡Felipillo! Esperaba tu llamada y llamado.

-Te estamos esperando para iniciar la reunión. Vente corriendo.

(…)

-Apreciados miembros y miembras de El Yunque y la Yunca. Los hemos convocado aquí para analizar la manera y el manero en que podremos sacar de la Presidencia a López. Ya estamos como el Coyote del Correcaminos, todas las trampas nos salen mal. Yo creo que hay que seguir utilizando a los bots y botas para que se difunda en todo el país que López apoya a los narcoterroristas y narcoterroristos y por eso no quiere la ayuda del Gobierno de los Estados Unidos.

(…)

-Ahora sí te la volaste, Chente. Eso de calificar al Presidente de terrorista estuvo de pelos. Se me hace que ahora sí lo vamos a tumbar de la silla. Con eso y la intervención gringa, nuestro amado partido y El Yunque tendrán nuevamente el control del país.

-Sí. Pero ahora hay que ver a quién apoyamos para que sea el próximo Presidente y Presidenta. ¿Qué te parece si lo echamos a la suerte? Si cae águila, es Martita y si cae sol, es Margarita.

-¡Sale! Así deben hacerse las cosas: Democráticamente. Oye, Chente, por cierto, siempre he querido preguntarte por qué repites la misma palabra en masculino y femenino…

-Es por culpa de Martita. Cuando estaba en la Presidencia y el Presidencio cada que mencionaba a los chiquillos me daba un codazo y me decía que también nombrara a las chiquillas. Por eso siempre decía “chiquillos y chiquillas”, para no hacerla enojar.

-Bueno, pues a poner en marcha nuestro nuevo plan.

-Sí. Mientras tanto déjame echarle una vuelta a mi ranchito y ranchita a ver cómo va el cultivo de mariguana y mariguano. Ya sabes, para mis reumas y reumos.