Ciudad de México.- La crisis por COVID-19 está complicando que el sector gasolinero cumpla con una Norma Oficial Mexicana (NOM) para dispensarios de combustibles con el fin de evitar la entrega de litros incompletos a los consumidores.

Se trata de la NOM-005-SCFI-2017 que entrará en vigor el próximo 8 de octubre. Ella establece que todas las estaciones de servicio que venden gasolina y diésel deberán contar con dispensarios nuevos o actualizados que cumplan con las características y especificaciones establecidas en dicha reglamentación.

La norma persigue registrar ajustes o alteraciones al sistema de despacho de combustible, cambio de precios, accesos al sistema electrónico (apertura de puertas) y modo de programación, cambio de fecha, hora y actualización de programas de cómputo.

“El cumplimiento de la NOM 005 ayudará a eliminar prácticas ilegales y a combatir al robo de combustible o ‘huachicol’”, comentó la Secretaría de Economía en un comunicado para precisar la aplicación de la norma, el pasado 29 de septiembre.

Un día después, los empresarios gasolineros expusieron las dificultades que enfrentan para cumplirla por la pandemia.

La Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) reveló que solo 30% de las 12,600 gasolineras del país han instalado o actualizado sus equipo, a pesar de que 70% de las estaciones de servicio registran solicitudes de compra o actualización a proveedores.

De las 14 marcas de dispensarios que se autorizaron, solo seis han obtenido aprobación de medio y prototipo favorable.

“Las autorizaciones han consumido alrededor del 60% del tiempo total fijado”, destacó Onexpo en un comunicado.

La asociación que encabeza Roberto Díaz de León explicó que la crisis sanitaria por covid-19 también afectó los procesos de producción, incluso el cierre temporal de fábricas de componentes porque su actividad no fue considerada esencial, además de que la caída de las ventas golpeó los presupuestos de las estaciones de servicio.

“Con la semaforización, y los protocolos de sana distancia, ha sido complejo que los proveedores puedan trasladarse con normalidad a las estaciones de servicio para realizar la substitución y actualización de dispensarios”, agregó la organización.

Los gasolineros propusieron que las autoridades consideren la exhibición de contratos de compraventa, de prestación de servicios, anticipos, facturas u otros elementos de valor legal, como una prueba demostrativa de que se está cumpliendo el proceso.

“De esa manera, los proveedores tendrán que especificar también los tiempos de entrega e instalación de los servicios contratados, programando sus stocks e incluso las rutas de instalación. La autoridad tendrá elementos adicionales para supervisar el cumplimiento regulatorio con absoluta certeza hasta culminar la autorización operativa de todos los nuevos equipos y sistemas”, agregó el grupo empresarial.