Tiempo de  opinar
Por Raúl Hernández Moreno

Hace apenas unos  días estalló el escándalo por el encuentro entre Santiago Abascal,  el líder del ultraderechista Partido Vox de España, con 15 de los 25 senadores del PAN.

El propio Presidente Andrés Manuel López Obrador aprovechó para decir que al menos el encuentro sirvió para  que los del PAN se quiten la careta y se exhiban como ultraconservadores.

Abascal está en contra del aborto, del matrimonio entre personas del mismo sexo, de que este tipo de parejas adopten y un largo etcétera de prohibiciones.

Donde se encuentre, a Abascal seguramente le habrá caído como patada de mula en la entrepierna, la noticia de que la Suprema Corte de Justicia despenalizó el aborto, mismo que esta criminalizado en 28 estados, incluyendo Tamaulipas,  y desde  ahora, los aparatos de justicia tendrán que liberar a las mujeres procesadas.

El diputado federal Santiago Creel dijo al respecto que el PAN  no tiene nexos con VOX, porque es humanista. A  finales del siglo XIX y principios del XX, los conservadores se declaraban humanistas, pero tenían esclavos en sus  haciendas a  los que les daban un trato cruel e inhumano.

El diputado  panista Francisco Garza de Coss de inmediato salió a decir que  su partido está en contra de despenalizar el aborto, postura que lo muestra como un conservador y lo hermana con VOX.

El presidente Andrés Manuel López Obrador se abstuvo de opinar sobre el tema y se limitó a decir  que es respetuoso de la ley. AMLO siempre ha sido conservador. Jamás  opina públicamente sobre el aborto, los sacerdotes pederastas, las relaciones entre personas del mismo género. No quiere crear polémica. Aunque es conservador, por alguna razón se  presenta como liberal, sin serlo.

El que no le guste a alguien  beber mezcal no le da derecho a promover una ley para prohibir el consumo de esa bebida. O el que a alguien  no le guste el futbol, tampoco le da derecho a prohibirlo.

En términos simples, ser liberal es permitir el derecho a disentir, a decidir, a tolerar. Mientras no se dañe a nadie, adelante. Que cada quien tome sus decisiones.

En otro tema, a través de sus colaboradores, el alcalde con licencia Enrique Rivas  Cuéllar creó un chat de whatsapp para dar a conocer algunos  temas que le interesa se conozcan, en estos días de presentación de informes.

Así se  dio a conocer  que en cinco años,  el Ayuntamiento redujo en 357 millones de la deuda heredada entre los años 2000 a 2012.

En 2016 la deuda  era de 942 millones  y actualmente es de 585 millones de pesos.

Se  destaca que en esos cinco años  no se requirió  ningún  crédito, es decir, se gobernó  haciendo  uso del presupuesto autorizado cada año.

Por cierto, que desde hace  más de una década, los alcaldes en turno omiten en sus informes el monto del presupuesto  ejercido en el año. Este se puede consultar en el Periódico Oficial del Estado, ¿pero que les  cuesta incluirlo? Este año el presupuesto de Nuevo Laredo  es de 3,336 millones de pesos