
POR: Evaristo Benitez Castro
Cuando la realidad nos ubica.
No por sabido debemos de ignorar-razonar asimilar, que en tiempos de problemas personales y en un entorno POLÍTICO, se escasean los amigos, la solidaridad, la compresión y el entendimiento entre humanos.
Quienes ya hemos visto pasar varias temporadas con el río San Marcos lleno de agua, podemos comparar la conducta de los políticos profesionales según la época, pero hay una característica que cubre y domina sobre todos los tiempos: cuando el poderoso es UBICADO POR LA REALIDAD pues pierde su soberbia, cumple su ciclo en la cumbre.
Esta reflexión se vino a mi mente ante la situación legal por la que pasa el ex gobernador de Tamaulipas Tomás Jesús Yárrington Ruvalcaba pues presiones para mi ocultas pretenden que no salga de prisión y siga en el fresco-bote unos añitos más.
Eugenio Javier Hernández Flores que casi por milagro anda en libertad, si bien con el Jesús en la boca pues pende del humor que tenga la federación para evitar su extradición a los EUA.
Francisco Javier García Cabeza de Vaca que confía siga la pendejéz entre el ministerio público y los juzgadores, además del agotamiento del gobierno demandante, para que se diluyan las acusaciones en su contra y lo dejen respirar tranquilo pero sobre todo que pueda venir a Tamaulipas a comer helado de elote en el pueblo Mágico de Tula.
Egidio Torre Cantú, a quien el actual titular del poder ejecutivo de Tamaulipas pretende sentarlo en el banquillo de los prevaricadores ante supuestos robos de recursos públicos.
Manuel Cavazos Lerma que por declaraciones machistas desafortunadas tiene un encierro voluntarios y terminó su vida pública, si bien ayudado por no pocos adversarios que ha ganado en su larga trayectoria política.
En otro ámbito ….¿Recuerda el nombre del Rector de la UAT anterior a Dámaso Anaya Alvarado?; o el nombre del alcalde victorense anterior al reelecto Gattás Báez?.
Parecería imposible que en un concepto genérico la sociedad respectiva no recordara los nombres de sus inmediatos anteriores líderes, en tanto que los boletines en su momento emitidos por ellos en gozo del poder, nos decían que sus gestiones históricas serían imborrables en la ciudadanía.
La realidad simple y llana nos dice otra cosa, al menos en nuestro país: la fuerza del político-servidor público radica en el PODER QUE LE DA LA INSTITUCIÓN que temporalmente representa; nada más pero nada menos.
Y eso lo saben quienes fueron sus colaboradores en tiempo, forma y lugar; por eso cuando se iniciaron los procesos judiciales de los ex gobernadores antes referidos….¿recuerda alguna manifestación pública o mensajes por escrito en su defensa declarando una injustica, por parte de CUALQUIER SECTOR SOCIAL?.
Cuando el político pierde el poder que provisionalmente le otorga la institución pública que REPRESENTA, pierde “amigos y socios”; la realidad lo ubica y le da su VERDADERA dimensión humana.
Que recuerde, NINGÚN presidente de la república, gobernador de Tamaulipas, alcalde, legislador, rector y posiciones públicas de poder equivalentes, ha conservado “las simpatías populares y la admiración de la sociedad” cuando abandona-concluye su encargo legal.
¡Basta de rodeos!!!: la recomendación de éste vejete es que gocen al máximo su posición de poder los políticos que eventualmente lo tienen; a la vez tengan plena certeza de que cuando sean políticamente huérfanos no deberán pararse en ninguna esquina del pueblo, o si se paran lleven botas de hule pues un perro puede orinarlos.
Este país maravilloso en que vivimos es prolífico para crear mitos, pero es aún mas ingenioso para destruirlos.