Opinión pública
Escupe para arriba
Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- No se necesitan encuestas para saber que la confianza ciudadana en la Guardia Estatal (seguridad pública) se ha incrementado sustancialmente en el gobierno de Morena, en relación a los porcentajes de hace tres años.
Confirma el dato la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción Sobre Seguridad Pública, realizada por el INEGI, una de las instituciones más serias y reconocidas de México.
La corporación dejó de ser un nido de delincuentes, llámese entonces Policía Rural, Fuerza Tamaulipas, Pepos, Gopes o Caiets.
En 2022 la confianza en la Policía Estatal era del 53.8 por ciento. En 2023 se disparó a 61.3 y en 2024 aumentó a 62.6 por ciento.
Mientras la confianza se eleva en casi diez puntos porcentuales, a los ojos de la comunidad la percepción de corrupción en la corporación bajó de 59 por ciento en 2022, a 53.4 en 2024.
La Guardia Estatal Tamaulipas nació por decreto el 10 de noviembre de 2022.
No se pueden hacer milagros pero la confianza del respetable es diferente a los últimos sexenios. Américo Villarreal le ha metido todos los kilos y pronto estarán en servicio 300 unidades más de la Guardia Estatal incluyendo vehículos blindados.
El anuncio lo hizo el propio AVA este lunes mientras descansaba “haciendo adobes” (periodo vacacional de la burocracia), o sea, trabajando.
“Cada quien descansa como más le gusta”, dijo a los periodistas en un recorrido de supervisión por obras de remodelación de la unidad deportiva Adolfo Ruiz Cortines, en esta capital.
Luego se dirigió a la Normal de Educadoras Estefanía Castañeda, donde se construye el gimnasio Américo Villarreal Guerra.
El martes andará por la Ciudad de Los Palacios en gestión de recursos para los proyectos estratégicos que impulsa. Cerrará la semana entregando las patrullas a la secretaría de Seguridad Pública.
Se entiende que el Gobierno de Tamaulipas anda de vacaciones. Las actividades ordinarias reanudarán el 4 de agosto, pero el ejecutivo y sus colaboradores siguen ebn la chamba.
Morena integró la Comisión Valuadora de Incorporaciones, en lenguaje llano el equipo que decidirá si aceptan como militantes a “chapulines” que tratan de incorporarse de otros grupos, el cascajo, resoca o desechos de la oposición.
La Comisión Antichapulín llevará como representantes partidistas a la presidenta Luisa María Alcalde; la secretaria General, Carolina Rangel y Alfonso Durazo, presidente del Consejo Nacional.
Por la sociedad civil dos periodistas, Epigmenio Ibarra Almada, nacido en la Cdmx en 1952, periodista, corresponsal de guerra, productor y cineasta, fundador de Argos Comunicación, productora de series y telenovelas.
El otro es Armando Bartra Vergés, nacido en España en 1941, escritor y filósofo, periodista, catedrático universitario, experto en temas rurales.
No está confirmado si habrá “antichapulín” estatal, pero ¿qué periodistas le gustaría que se integren?.
Los morenos crearán más de 70 mil comités seccionales del partido con al menos 5 personas, lo que les garantiza 360 mil operadores.
Por Tamaulipas son poco más de dos mil seccionales, que en sus días de gloria el PRI mantuvo bien “enaceitados”. Hoy no existen.
Otro de los acuerdos guindas es el plan municipalista que pide a los alcaldes emanados del partido, dediquen un día a la semana a atender directamente a la población, léase audiencias públicas en territorio, mantener finanzas sanas y poner ejemplo con austeridad republicana.
Quieren llegar a la elección de 2027 con 10 millones de militantes, algo que nunca un partido político en México ha logrado.
Martes de sesión del Tribunal Federal Electoral. Resolverán dos temas que tienen que ver con Tamaulipas, quejas del PAN porque dicen que el TRIELTAM no les notificó los nombramientos de Selene López Sánchez y Arturo Barrientos Treviño como secretarios de estudio y cuenta, y luego nombrados magistrados en funciones.
El que insiste en escupir para arriba es el “nanito” Ismael García Cabeza de Vaca que cobrea como diputado.
Criticó en redes la aprobación de un préstamo -o adelanto de participaciones- por mil millones solicitado por el Gobierno del Estado: “Desde el Congreso nadie dijo nada. Silencio cómplice y votos ciegos”.
Lo que no dice es que él es diputado local, y el día de la sesión no fue. Justificaron faltas su compadre Vicente Verástegui y Ma del Rosario González Flores.
El resto de sus colegas que sí asistieron, Gerardo Peña Flores, Mireya Saldívar Cano y José Schekaiban Ongay, votaron en abstención.
La panista Marina Ramírez registra a favor por el acuerdo de la Ley Interna: “Si algún diputado abandona el salón de sesiones durante la votación o se abstiene de emitir su voto, el mismo se computará unido al de la mayoría que se forme con base en los diputados que sí lo expresen”.
A Don Ismael le gusta, disfruta darse balazos en los pies ¿cierto?.