Tiempo de opinar
Por Raúl Hernández Moreno
A partir del 18 de mayo, México dará los primeros pasos para regresar a la normalidad de la que gozamos hasta los primeros días de marzo.
El confinamiento inicio en Tamaulipas el 17 de marzo. Ya llevamos 58 días, y en el resto del país empezó el 23 de marzo. Un día antes el Presidente cometía la insensatez de invitar a la gente a salir a consumir: “No dejen de salir…sigan llevando a la familia a comer a los restaurantes y fondas”.
Y dos semanas antes, el 4 de marzo, minimizaba la pandemia: “Hay que abrazarse, no pasa nada”.
Y si paso, y mucho, desde que se detectó el primer caso de Covid-19, el 27 de febrero, a la fecha, hasta ayer se contabilizaban 3,926 muertos. Hay luto y dolor directo en 3,926 familias y de manera indirecta en otras miles de familias que conocían a alguno de los muertitos, o sus familias. 4 mil muertes es una tragedia, aunque el Presidente festeje y diga que la pandemia “Nos vino como anillo al dedo para afianzar el propósito de la 4T”.
El regreso a la normalidad no será instantáneo, como quisieran muchos. El 18 de mayo en 265 municipios donde hasta el momento no se han presentado contagios, reactivarán las actividades económicas, practicando medidas de sana distancia.
A parir de ese día también reanudarán actividades como la construcción, minería y la industria automotriz. El 1 de junio se abrirán actividades educativas, recreativas y económicas. Los estados serán autorizados a reabrir, en funciones de las estadísticas que se registren en cada uno de ellos, para lo cual se ha instrumentando un semáforo de riesgos. El verde es para estados con pocos casos, el amarillo para los estables y el rojo donde hay más casos. Tamaulipas esta en amarillo.
También para el 18 de mayo, o sea el próximo lunes, está prevista le reapertura de los puentes internacionales para los mexicanos. Los puentes siempre han estado abiertos, pero para los americanos y emigrados y casos especiales.
La vuelta a la normalidad no será fácil. Hagámonos a la idea de que vamos a usar tapabocas y gel durante muchos meses más, hasta en tanto no se descubra una vacuna. El Civid-19 ya es una enfermedad más, como la diabetes, la hipertensión, las cardiovasculares. Los pacientes que padecen enfermedades crónico-degenerativas, saben las medidas que deben tomar para protegerse. Si no lo hacen, es bajo su propio riesgo. Igual va a pasar con el Covid-19.
En medio de todo esto, el ex presidente Vicente Fox se voló la barda al decir que la está pasando bastante mal estos días, que vive al día y que difícilmente tiene para comer. Se trata de un cuento chino, pero si fuese verdad, que le pida apoyo a los raterazos de sus hijastros, los hermanos Bribesca que se hicieron multimillonarios durante su sexenio, utilizando el parentesco para toda clase de negocios, como comprar casas del Infonavit a 17 mil pesos.