Tiempo de opinar
Por Raúl Hernández Moreno

Palo dado ni Dios lo quita, dice un conocido refrán.

Los neo-panistas incrustados en Morena hoy lloran la aplastante derrota que sufrieron el pasado domingo, dicen que fue un proceso fraudulento, exigen que se anule los resultados y que se repita la elección. De haber ganado, habrían dicho que la elección fue democrática.

¿Valdrá la pena reponer el proceso para que se repitan los resultados y de nuevo escuchar que hubo fraude?

Haiga sido como haiga sido, una fracción se impuso y ya era justo, porque la otra parte era panista hace tres años y a pesar de eso, se les ha dado un trato privilegiado. No tienen la ideología de Morena. Mudaron de camiseta partidista porque no pudieron controlar al PAN y de paso se enfrentaron al Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca. Su más destacado líder fue alcalde por el PAN y el otro fue regidor, sin sudar, y después se le permitió ser candidato a diputado federal y teniendo todo a su favor, con el nombre de Andrés López Obrador en la boleta, perdió. Sin ser de Morena, luego se le nombró delegado federal en Nuevo Laredo. A ese grupo este año se le permitió designar como candidatos a diputados locales a Carmen Lilia Canturosas, a Diana Cantú y a Esther García. Hace un par de semanas, desde el CEN de Morena se les regalo la coordinación del Congreso, pero hubo rebelión entre los diputados y echaron atrás la imposición.

A pesar de lo mucho que se les da dado, no son agradecidos con Morena, ni con su militancia, esa militancia que les había tolerado toda clase de imposiciones. Quieren todo. Absolutamente todo. Se sabe que meses atrás presentaron una lista pidiendo más de una decena de delegaciones federales y de paso vetaron las listas presentadas por otros personajes del morenismo a los que no les gusta el escándalo.

Al no obtener ningún consejero, ahora viene la descalificación eterna de todo lo que haga la fracción ganadora y es posible que amenacen con salirse del partido. Si eso pasa, hay que tomarles la palabra. Es lo mejor que podría pasarle a Morena. Teniéndolos fuera harían menos daño, porque además son un grupo que trabaja para sus intereses, no los del partido.

A pesar de que no obtuvieron un solo consejero, van a apostarle a que desde el CEN de Morena los ayuden, como lo han hecho, hasta ahora.

En otro tema, el presidente municipal Enrique Rivas Cuéllar visitó la escuela Jesús del Ángel Acevedo Rodríguez, en la colonia Villas del Sol y de esta forma inició la segunda vuelta a 300 escuelas, dentro del programa “Mi escuela digna, moderna y saludable”.

Durante esta segunda visita, previamente cada escuela entrega al Municipio una lista del equipamiento y necesidades, y el ayuntamiento establece que peticiones son prioritarias.

Todas las escuelas, desde pre-escolar a universidad han recibido alguna obra o equipo y es que las necesidades nunca se acaban. Qué bueno que el alcalde Enrique Rivas tiene la sensibilidad de no escatimar recursos para apoyar a los planteles escolares y ayudarles a mejorar sus instalaciones en beneficio del estudiantado.