Los militares en política
-Rebeliones y revueltas, en busca de poder
-Tienen los mismos vicios que los civiles
-Nuevo Laredo, evaluado financieramente
-Asesoran a emprendedores
Tiempo de opinar
Raúl Hernández Moreno
Meses antes de formalizarse la fundación del Partido Nacional Revolucionario, en marzo de 1929, el general Plutarco Elías Calles, convocó a los principales jefes militares y los caciques políticos, para explicarles los objetivos que se buscaban con el nuevo instituto político y les remarcó que había llegado la hora de acabar con los caudillos y dar paso a un gobierno de instituciones.
Y es que antes del PNR, desde el estallido de la revolución, en 1910 y hasta fines de 1928, en el país abundaron las revueltas y rebeliones militares, en busca de poder, con una diferencia de unos pocos meses. De hecho, esa era la vocación de México, desde que surgió como nación en 1821. Desde ese año y hasta el arribo del general Porfirio Díaz, en 1876, el país registra más de medio centenar de rebeliones y revoluciones. Don Porfirio pacificó el país, pero a costa de aplastar y aniquilar a los adversarios y formalizó la esclavitud de los indígenas, en las haciendas tabacaleras del Valle Nacional y en Yucatán.
En plena revolución y hasta finales de la década de los treinta del siglo XX, los generales encargados de las zonas militares rivalizaban en poder con los gobernadores civiles, apoyaban candidatos, aplastaban a los opositores y abusaban de su poder.
Así vimos a un general Maximino Ávila Camacho, que fue jefe militar en Chiapas y Zacatecas, rivalizando con los gobernadores y provocando la protesta de estos ante el presidente de la república.
Luego de la fundación del PNR siguieron cuatro generales que fueron presidentes: Pascual Ortiz Rubio, Abelardo Rodríguez, Lázaro Cárdenas y Manuel Ávila Camacho, además de Emilio Portes Gil. Los militares tenían su propio sector en el PNR, al lado de la CTM, CNC y CNOP.
En 1938, Cárdenas transformó al PNR, lo convirtió en Partido de la Revolución Mexicana y de paso eliminó al sector militar, lo que no fue obstáculo para imponer como candidato al general Manuel Ávila Camacho, que participó activamente en la sofocación tanto del movimiento cristero como de la rebelión escobarista. No fue un militar brillante, pero sí estuvo activo.
Ávila Camacho fue el último militar que estuvo en la presidencia y desde entonces a la milicia se le prohibió participar en política, estando activos. Desde entonces el ejército ha sido institucional y respetuoso del poder civil. En la recta final del sexenio de Gustavo Díaz Ordaz, a su secretario de la Defensa Nacional, general Marcelino García Barragán, un grupo de militares lo invitó e incitó a dar un golpe de estado, para restaurar la seguridad en el país, puesta a prueba por el movimiento estudiantil, y él se opuso.
García Barragán, por cierto, fue padre de Javier García Paniagua, ex director de la Dirección Federal de Seguridad, en el sexenio de José López Portillo, quien a su vez es el padre de Omar García Harfuch, actual secretario de Seguridad Pública, el delfín de la presidenta Claudia Sheinbaum para el 2030.
Permitir que los militares en activo puedan ser candidatos a cargos de elección, sería un gravísimo error para el país, similar a autorizar a los sacerdotes y pastores a que sean candidatos, sin renunciar a su ministerio.
La historia debe servirnos para no repetir los errores del pasado.
La historia reciente confirma que los militares no son el remedio para los grandes y pequeños males que enfrenta el país.
El expresidente Andrés Manuel López Obrador les dio mucho poder a los militares, convencido de que serían de ayuda para acabar con la corrupción en las aduanas, para pacificar al país, para construir obras faraónicas y hasta ahora no se ha tenido éxito en ninguna área.
¿Se imagina a un jefe militar como candidato, utilizando a sus subordinados para imponerse, a cómo de lugar?
Por otra parte,
La alcaldesa Carmen Lilia Canturosas participó en el foro “Fitch on México”, organizado por la calificadora Fitch Ratings.
En el evento, titulado “El Futuro de la Transformación Comercial y los Riesgos Geopolíticos que Impactan a México”, la presidenta municipal fue reconocida por encabezar uno de los municipios mejor evaluados financieramente del país, con la máxima calificación nacional de largo plazo: ‘AAA(mex)’.
Frente a funcionarios de alto nivel y expertos internacionales en finanzas públicas, como el Secretario de Hacienda de Baja California, Marco Antonio Moreno, representantes de BANOBRAS y directivos de Fitch, Canturosas expusieron las políticas que han permitido a Nuevo Laredo mantener la estabilidad fiscal, avanzar en infraestructura y enfrentar retos propios de su ubicación fronteriza.
Entre las acciones clave se mencionó la actualización de valores catastrales, mejoras en la elevación del predial y estrategias para recuperar cartera vencida, lo que ha permitido al municipio sortear reducciones en fondos federales.
Canturosas también subrayó la relevancia de proyectos clave como la Vía Ferroviaria San Luis Potosí–Nuevo Laredo, la conexión ferroviaria con Kansas City Southern, la ampliación del acceso al Puente del Comercio Mundial y la atracción de inversiones ligadas al nearshoring.
En otro tema, la Secretaría de Economía llevó a cabo la estrategia de capacitación “Ventanilla a tu alcance” con representantes de ayuntamientos y de organizaciones empresariales del estado, con el objetivo de dar a conocer los servicios estatales de apoyo a emprendedores y empresarios tamaulipecos,
La secretaria de Economía, Ninfa Cantú Deándar, informó que esta estrategia consolida la alianza institucional con los ayuntamientos y los sectores productivos para acercar los apoyos que brinda la administración del gobernador Américo Villarreal al sector empresarial tamaulipeco.
Los eventos se realizaron en Ciudad Victoria, Tampico y Reynosa, con la participación de representantes de 26 municipios, siete organismos empresariales y nueve instituciones académicas.
Entre los servicios que ofrecen las Ventanillas de Atención destacan Diseño de logo por convocatoria, asesoría en trámites de registro de marca ante IMPI, asesoría para el trámite de membresía GS1 para código de barras, vinculación con laboratorios alimenticios, promoción y comercialización y el Distintivo Hecho en Tamaulipas.