Maremágnum
Por Mario Vargas Suárez

Quizá una actitud popular que está imponiendo la Cuarta Transformación (4T) es el ¿ya clásico? abucheo a los gobernadores en su propio territorio, donde se supone fueron elegidos a la buena y en su mayoría gozan de altos índices de popularidad.

Escribe el director del periódico Excélsior, Pascal Beltrán del Río, “La escena se repite cada vez que el presidente Andrés Manuel López Obrador está de gira fuera de la Ciudad de México -cosa que por lo general ocurre los fines de semana- en compañía del gobernador del estado: la gente rechifla, abuchea al mandatario local y el Ejecutivo sale en su defensa, pidiendo respeto.”

La táctica repetida en varias entidades del país, inició con la gira de agradecimiento del entonces presidente electo, pero se ha repetido la misma ‘medicina’ ya con el presidente en funciones.

Los abucheos y rechiflas se iniciaron en Baja California Sur, Coahuila, Aguascalientes y Nuevo León, incluso le tocó al ‘Cuau’, Cuauhtémoc Blanco, gobernador de Morelos, y pese a que no ganó la Silla Grande por un partido de la ‘mafia en el poder’ si tuvo un enfrentamiento verbal con la dirigente de Morena, Yeidckol Polevnsky, por la conformación de las bancadas en el Congreso morelense.

Después de la toma de posesión de López Obrador, los abucheos siguieron para los titulares de los Ejecutivos de Tabasco, Hidalgo, Michoacán, Oaxaca, Zacatecas, el Estado de México, Sinaloa, San Luis Potosí, Tlaxcala y Quintana Roo.

Como si algo le debieran al presidente, en Guerrero y Coahuila los gritos y sombrerazos se repitieron en la segunda visita presidencial contra los gobernadores.

En los actos donde aparece el gobernador local y el presidente de todos los mexicanos, el método es el mismo: abucheos, rechiflas prolongadas de un sector de los asistentes contra el mandatario estatal, hasta que entra a escena el Señor Presidente e ‘impone paz’, les ‘regaña’ e indica ‘se porten bien’.

Un video que circula en redes sociales muestra que la gobernadora de Sonora, la Priísta Claudia Artemiza Pavlovich Arellano, paisana de Luis Donaldo Colosio Murrieta, no soportó que la conductora del programa la omitiera en la presentación del presídium, por lo que le hicieron llegar un micrófono y apenas tuvo la oportunidad, se levantó y adueñó del escenario.

En el video claramente se ve como el presidente de todos los mexicanos, intenta tomar del brazo a la gobernadora sonorense y ella, muy ágilmente en un movimiento ágil, esquiva el ancla presidencial.

“Están contentos con la llegada del presidente López Obrador… están contentos con los apoyos que les viene a dar a los adultos mayores, a los discapacitados, a los jóvenes… que bueno que están contentos, aquí el presidente se le quiere, se le respeta, y estamos muy contentos de recibirlo…” decía muy segura micrófono en mano Claudia Pavlovich, mientras los gritos de los ¿acarreados? la increpaban llamándole corrupta.

Otro gobernador, ahora el de Colima, el también Priista José Ignacio Peralta Sánchez, es el más recientemente ‘castigado’ por la ‘cargada’ aparentemente incógnita, cuando fue interrumpido y abucheado mientras ofrecía un mensaje de bienvenida al presidente Manuel López.

‘Nacho’ Peralta, como le conocen en aquella entidad del Pacífico, tuvo la paciencia para suspender su bienvenida y ‘aguantar’ las muestras de ‘enojo y repudio’ de la gente. “Podemos dejar que se desahogue esta parte de lo que parece ser un protocolo en todas las entidades federativas para que después de esas buenas prácticas parlamentarias, ya me permitan a mí hacer uso de la voz”  dijo al micrófono pausadamente.

Y después de varios minutos de mentadas de madre y esas ‘linduras’ auditivas, Nacho Peralta expresó “¿Le van a seguir o ya terminaron… Desahogado el punto de la orden del día del abucheo, sigo entonces con mi mensaje: Señor presidente, por su puesto en esta pluralidad no podemos ofrecer incondicionalidad, eso no sería digno, usted recibirá de nosotros un respaldo reflexivo, propositivo en los tema prioritarios para el país y para Colima.”

Dentro de la política mexicana jamás había sucedido algo similar, estas son manifestaciones de la 4T, por ello la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO) levantó la voz -por cierto apenas audible- en protesta por estos hechos.

La gran interrogante: Qué entidad federativa busca fecha en la agenda presidencial para recibir al tabasqueño llegado a la Silla Grande de Palacio Nacional, que no de Los Pinos.