C R O N I C A S    P O L I T I C A S

Quién teme que se vaya el IETAM?  

     Por Alberto Guerra Salazar

CIUDAD VICTORIA, (ASI).— Hace más de dos años, el médico Felipe Garza Narváez renuncio a su militancia de más de 30 años en el PRI, convencido que su dirigencia de la época, en manos de Enrique Ochoa Reza, encarnaba una decadencia irreversible. Ayer, José Narro confirmó la visión premonitoria del político tamaulipeco.

Narro Robles, dos veces Rector de la UNAM, Secretario de Salud, se inscribió para competir por la presidencia nacional del PRI, pero se convenció que sólo serviría de comparsa y prefirió hacerse a un lado y de paso, renunciar de plano a ese partido.

En su mensaje de difusión nacional, Narro insinuó que el candidato oficial (Alejandro Moreno Cárdenas, Alito) es respaldado por “el que fue recientemente el jefe político del partido”. No lo menciona por su nombre, pero se refiere a Peña Nieto.

Claudia Ruiz Massieu Salinas está atrapada en su laberinto. No tiene forma de echarle montón al ameritado universitario porque todo mundo sabe que le asiste la razón al repudiar las prácticas corruptas y anti-democráticas del partido tricolor.

Tendrá que hacerle al tío Lolo, fingir que no pasa nada, hacer elegir a Alito, entregarle el cargo y desearle buena suerte, mientras que a su alrededor se sigue desmoronando la estructura partidista que fue poderosa, invencible, aplastante.

Yahleel Abdalá Carmona tampoco se dará por enterada que les llueve sobre mojado, porque aquí siguen batallando para mantenerse a flote. En su natal Nuevo Laredo se anunció que instalaciones del edificio del comité municipal partidista, serán rentadas a particulares, para obtener dinero.

Esa decisión podría ser reconvenida por las autoridades electorales, debido a que el edificio fue construido con prerrogativas gubernamentales, para uso exclusivo de actividades políticas, no para actividades comerciales lucrativas, mercantiles.

El PRI tamaulipeco no ha emprendido el proceso de lavarse la cara luego de que sus 22 candidatos a diputados locales fueron revolcados espantosamente, al ser derrotados en las urnas, cayendo hasta el tercer lugar de (no) preferencias.

Lo que sigue es que Egidio Torre Cantú ordene que se haga en lo oscurito la renovación de la directiva estatal, a su gusto, pues ninguno de los notables ha dado señales de querer ir por el rescate de su partido.

Mientras tanto, el tema de moda es la propuesta de reforma electoral, que contempla la desaparición de los órganos electorales en los Estados, la disminución, de 11, a 7, de los miembros del Consejo General del INE, y la disminución hasta la mitad, del financiamiento público a los partidos.

Desaparecer al IETAM significaría para el gobierno del Estado, el ahorro anual de varios cientos de millones de pesos, pero también, la pérdida del control del manejo del órgano estatal electoral, cuyos integrantes le son adictos.

Esto no es ninguna exageración. Actualmente, el IETAM padece secuelas de una crisis provocada por la injerencia del poder ejecutivo local, pues el consejero presidente fue destituido por haber nombrado a un panista como secretario ejecutivo.

Un consejero interino presentó se renuncia aduciendo motivos personales, y actualmente encabeza al IETAM una presidenta interina, con el faltante de uno de sus siete integrantes.

La iniciativa de reforma presentada en la cámara de diputados por representantes de MORENA, de suprimir los órganos electorales de los Estados, busca conseguir ahorro de dinero, pero también, sustraerlos de la esfera de influencia de los Gobernadores.

El tema no es nuevo, de que los Gobernadores interfieren en el funcionamiento de los órganos electorales, para ponerlos a su servicio. Otra reforma electoral que data del año 2014, tuvo la misma intención y se consiguió ese objetivo, pero parcialmente.

El INE tiene a su cargo, funciones torales de la ejecución de elecciones locales, tales como la credencialización de electores, manejo del padrón, materiales como impresión y distribución de boletas, mamparas, instalación de casillas, fiscalización, etcétera.

Los consejeros electorales estatales son designados por el INE mediante convocatorias públicas, lo que los sustrae hipotéticamente, de la influencia de Gobernadores.

Técnicamente, ya no es posible adulterar resultados electorales, porque fueron desterradas aquellas prácticas de la urna embarazada, el carrusel, los tacos de votos, que se volvieron tradicionales cuando era el gobierno el que se encargaba de organizar y ejecutar las elecciones locales.

Ahora reinan otras prácticas igualmente inmorales y hasta ilegales, pero que se producen afuera de las casillas, tales como el reparto de despensas y otros sobornos encubiertos o disfrazados, que a veces hacen torcer el sentido de la voluntad popular, con resultados inverosímiles, increíbles, disparatados.

Las deliberaciones sobre los pros y contras de la reforma electoral encienden a la cámara de diputados, y aún es temprano para adivinar el desenlace. Por eso es ocioso preguntarse aquí, ¿cómo se harían las elecciones si desaparece el IETAM?

Eso, porque la vocalía ejecutiva del INE en Tamaulipas no tiene infraestructura humana ni material, para emprender la organización y ejecución de una elección local, la del año 2021, por ejemplo.

Tendría que recontratar a personal del IETAM, para poder cumplir la tarea, pero después de agotar complejos procedimientos de despidos, indemnizaciones, liquidación de derechos laborales adquiridos, renuncias definitivas…y recontrataciones. Si ese fuera el caso.

Lo único positivo de un viraje de esa naturaleza, es que las elecciones locales serían más vigiladas, serias, imparciales, objetivas y con resultados congruentes. Valdría la pena hacerlo.

Cambiamos de rumbo para referir que las temperaturas candentes han desatado epidemias de males estomacales y hasta golpes de calor, con saldo de personas fallecidas, aunque las autoridades sanitarias del Estado lo ocultan.

La Secretaria de Salud Gloria Molina Gamboa quedó acostumbrada a esconder bajo la alfombra, información delicada, desde que lo hizo con la epidemia de dengue. Las deshidrataciones están a la orden del día, pero el gobierno estatal, panista, no hace campañas de prevención.

Abundan decesos por contagios de enfermedades, especialmente en hospital del sur del Estado, pero la Secretaria Molina Gamboa lo niega con singular alegría. Continúa el desabasto de medicinas y la falta de personal, pero igual, no atienden.

La opacidad es la marca de este gobierno. Presumen que ya construyen estaciones carreteras cada 50 kilómetros, con arcos de seguridad y video-cámaras de seguridad, con vigilancia policiaca permanente, para recuperar, ahora sí, el control de las carreteras.

Pero mantienen oculto el nombre de la empresa y de los dueños que “ganó” el concurso de la adjudicación del contrato que les redituará el pagó de 58 millones de pesos mensuales, durante seis años, por venderles las cámaras de video-grabación.

Por cierto, la noche del lunes fue herido a balazos el jefe de talleres de un periódico victorense, pero las autoridades mantienen obstinado silencio. Sus prioridades son otras, de carácter político futurista.

Cumplen años José Azpeitia González, Mario Arizpe Martínez, Humberto Zolezzi García, Rodolfo González Valera, Salvador Leal. Fiesta familiar anticipada por el aniversario natal de Ernesto Guajardo Maldonado.

Recuerdo cariñoso en la familia y amigos del profesor y periodista Jorge Rodríguez Treviño, por su cuarto año de desaparición física. Extraordinario compañero de trabajo, padre de familia y profesional de las letras.

Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com