Tiempo de opinar
Por Raúl Hernández Moreno

El miércoles, en la sesión del Congreso del Estado, las diputadas Carmen Lilia Canturosas e Imelda Margarita Sanmiguel Sánchez, tuvieron un encontronazo con el tema del puente III.

Y es que el lunes, el senador suplente Alejandro Rojas, junto con los diputados de Morena, Carmen Lilia Canturosas y Rigoberto Ramos –los que casualmente se ostentaron como Presidente y Vice-presidente, respectivamente, de la bancada de su partido, pero fueron desconocidos por sus compañeros— difundieron la propuesta de que el fideicomiso del puente III lo deje de operar el Gobierno del Estado y que los recursos los maneje el Municipio.

En tribuna, la diputada Sanmiguel arremetió contra Rojas, a quien no mencionó por su nombre y lo acusó de ser promotor del escándalo y del escarnio, así como a los diputados Canturosas y Ramos, y dijo que ignoran la forma en que opera el Fideicomiso.

Expuso que del 100 por ciento de los ingresos que se recaudan por peaje, el 5 por ciento se entrega a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el 12.5 al Municipio y el resto se destina para la operación, mantenimiento y modernización del puente III y enumeró una serie de obras realizadas en los últimos años.

Destacó que diariamente cruzan 14 mil camiones por ese puente, el año pasado tuvo un aforo de un millón 911 mil unidades y por ahí pasa el 40 por ciento de las mercancías del comercio internacional de México.

Sanmiguel sostuvo que el federalismo está en riesgo y Morena pretende convertir al país en una república central de un solo hombre y le dijo a Carmen Lilia que “no es un honor estar con López Obrador, porque Tamaulipas es un Estado de gente que le gusta trabajar”.

Incluso le reprocho a Carmen Lilia no haber presentado un exhorto sobre este tema cuando fue regidora por el PAN y dijo que su hermano Carlos cuando fue alcalde quiso destinar los recursos del Fideicomiso del Puente III para instalar cámaras de seguridad y pavimentación de calles, sin estar permitido.

La realidad es que el Fideicomiso del Puente III, creado en 1996, va a desaparecer cuando se liquide la deuda total que generó la construcción del cruce y entonces este lo va a operar el gobierno federal, a través de Caminos y Puentes Federales de Ingresos, como sucede con el puente I y II.

Entonces sí, Nuevo Laredo recibiría solo el 12.5 por ciento del peaje recaudado.

El puente se pudo haber liquidado hace 15 años o 12. Lo recaudado da para eso y más, pero al liquidarlo el control lo tendría el gobierno federal al 100 por ciento. No hay otra opción. La ley no lo contempla y pensar en las buenas intenciones del gobierno federal es infantil. Alguna vez, cuando era candidato, López Obrador dijo que de ganar la presidencia el uso de las autopistas sería gratuito. ¿Le creemos a Rojas?, claro que no.

Que el puente III se siga manejando a través de un Fideicomiso es lo mejor para Nuevo Laredo, de esa manera habrá más recursos para mejorar la infraestructura del cruce. Lo ideal sería el que puente III lo manejara Nuevo Laredo, junto con los puentes I y II, pero la ley no lo contempla.

Los diputados de Morena meten mucho ruido en este tema porque quieren raja política. Quieren debilitar al Estado y al Municipio porque los ven como adversarios, sin importar que sus propuestas afecten a la ciudad.