
Tamaulipas, con finanzas sanas
-Gobernador invita a foro sobre reforma electoral
-Crimen de Manzo, exhibe estado fallido
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Raúl Hernández Moreno
3-noviembre-2025
El presupuesto de Tamaulipas pasará de 77 mil 300 millones de pesos en el 2025, a poco menos de 81 mil millones en el 2026, adelantó el flamante secretario de Finanzas, Carlos Ramírez González.
Reveló que la deuda pública es de 15 mil 150 millones de pesos y que este año se pagaron alrededor de 700 millones. Para el 2026 no se contempla solicitar créditos y se optará por ajustar el gasto al presupuesto autorizado, para mantener finanzas sanas.
Antes del 10 de diciembre, el gobernador enviará al Congreso la propuesta de presupuesto, para su revisión, análisis y aprobación.
Por cierto, el gobernador Américo Villarreal Anaya convocó a los tamaulipecos a participar en el foro de consulta sobre la reforma electoral, que se realizará los días 6 y 7 de noviembre, en el gimnasio multidisciplinario de la UAT, en Ciudad Victoria.
Más allá de que Morena tiene la mayoría en el Congreso Federal y estatal -y que primero debe aprobarse la federal y luego las estatales, respetando el espíritu de aquella- es una oportunidad para que partidos y sociedad civil presenten sus propuestas.
Que Morena no tenga pretexto para decir que no hubo debate, que no hubo propuestas, aunque al final se salga con la suya, sin escuchar las sugerencias, como sucedió con la brutal imposición de la reforma al poder judicial.
A propósito de la reforma electoral, el ex vocal ejecutivo del INE en Tamaulipas, Nayarit y Chiapas, Arturo de León Loredo, propone mantener los organismos públicos locales electorales, conservar la representación proporcional y que estos no se definan por una lista nacional, sino en base a los más votados, que no hayan ganado la elección.
En cuanto a los OPLES, sostiene que eliminarlos sería un retroceso democrático y se vulneraría la autonomía de los estados. De las diputaciones de minoría dice que han funcionado muy bien, desde su formación, en la década de los años sesenta del siglo 20 y deben mantenerse.
Sin embargo, dice que debe cambiarse el método de selección, para que, en vez de elegirles por una lista nacional, se seleccione a los más votados, después del ganador. Coincidimos con él, de esta manera los dinosaurios políticos de los partidos tendrían que demostrar en las urnas sus dotes de líderes.
Por otra parte, el artero crimen del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, de 40 años, le da argumentos al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump para insistir en su narrativa de que el crimen organizado controla grandes zonas del del territorio mexicano
También le da armas a los opositores para afirmar que tenemos un estado fallido, en el que a la presidenta Claudia Sheinbaum se le agotaron los argumentos para justificar su incompetencia y por eso sale con su tontería de que el crimen de Manzo es el resultado de que no funcionó la guerra contra el narco declarada por el expresidente Felipe Calderón.
Entonces, ¿si funcionó la estrategia de abrazos y no balazos de AMLO, que dejó 200 mil muertos y 52 mil desaparecidos? Aparte, dice que hablar del asesinato de Manzo es sacar raja política, ¿entonces no se debió dar a conocer?
Carlos Manzo denunció durante los meses anteriores que había sido amenazado por el Cártel Jalisco Nueva Generación y desde ese momento, como la novela “Crónica de un crimen anunciado”, de Gabriel García Márquez, muchos mexicanos ya sabíamos que lo iban a matar. La única no se dio cuenta, o volteó a un lado, fue la presidenta, que no tomó medidas para protegerlo, quizá porque no militaba en Morena, sino que ganó la alcaldía compitiendo como candidato independiente, triunfando con el 66 por ciento de los votos emitidos.
Si el crimen de Manzo hubiera ocurrido cuando gobernaba el PRI o el PAN, los izquierdistas ya hubieran tomado las calles para pedir las renuncias del gobernador de Michoacán y de la presidenta.
Ya estarían gritando que tenemos un estado fallido, que tenemos un narcoestado, que, si no saben gobernar, que renuncien y lindezas por el estilo.
