HIPÓDROMO POLÍTICO
POR CARLOS G. CORTÉS GARCÍA
Alejandro Rojas Díaz Durán se quedó con las ganas de ver sangre en la plaza pública.
Tamaulipas bien, muy bien en seguridad: Cabeza de Vaca.
Gerardo Fernández Noroña, otro “pantorrillero” en potencia.
Economía mexicana decrecerá 12.8% en 2020: BANXICO.
El jueves, antes del inicio de la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador por Tamaulipas, el barbaján de Alejandro Rojas Díaz Durán, el ya famoso “Perrito Pantorrillero”, por aquello de morder en la pantorrilla y ladrar hasta aburrir, emitió un mensaje a través de un video en redes sociales, amenazante y muy majadero, “advirtiendo” al gobernador de Tamaulipas, no tratar mal al presidente López Obrador durante su visita a Tamaulipas.
Macho, muy macho, el de los sueños guajiros por dirigir MORENA nacional, que, como buen cobarde, no viene a Tamaulipas sino que, desde muy lejos, lanza la piedra sintiéndose el muy muy, aunque no pasa de perico perro. Y como dijo Don Teofilito, ni pasará.
Entonces, al pantorrillero le salió el tiro por la culata, porque Francisco García Cabeza de Vaca, como buen torero, en esa mañanera se llevó oreja y rabo. Y dio, además, el mandatario tamaulipeco, una clase de civilidad política, con una elegancia discursiva digna de comentar, y puso en su lugar a quienes debió poner. Fue un ejercicio destacado de parlamentarismo el aplicado por el gobernador.
Y es que Alejandro Rojas Díaz Durán vive con sus frustraciones a flor de piel y, como he repetido hasta la saciedad, este tipo siente que “tiene para todos”. Y entonces, desde la clandestinidad que le dan las redes sociales, el Pantorrillero grita, amenaza y se desgarra las vestiduras, y no porque quiera ayudar al presidente López Obrador desde la dirigencia nacional de MORENA, claro que no, sino porque llegar a la dirigencia nacional de MORENA el botín que representa no es nada despreciable.
¿Pues de cuanto estamos hablando? Según el Reporte Electoral 2018 de Integralia, Morena recibió 414.9 millones de pesos para ese año 2018 y, de acuerdo con su cálculo, para 2019 debió haber obtenido 1,557.2 millones de pesos, es decir, lo que significa un incremento de 3.7 veces más que lo recibido en 2018. ¿Se imagina, entonces, querido lector, cuando se estará levantando MORENA entre 2020 y 2021?
Para el año 2020, los partidos políticos recibirán los siguientes presupuestos: Morena, $1,653,944,795; el PAN, $908,790,729; el PRI, $856,063,024; el PRD $418,829,549; el PVEM, $399,841,446; el Movimiento Ciudadano, $385; 113,498; y el PT, $366,281,873. Así de jugosos son los presupuestos de los partidos políticos.
¿Jugoso el presupuesto de MORENA? Jugosísimo, claro. Y por ello, la necedad y necesidad, de Rojas Díaz Durán, el “Perrito Pantorrillero”, por fajarse con quien sea para defender lo que este señor piensa es su patrimonio -MORENA-. Sin embargo, la mala noticia de este día para él, Rojas Díaz Durán, es que no será presidente nacional del partido y su esfuerzo pendenciero de los últimos meses, cuando mucho le dará la posibilidad de acceder a la cámara de Diputados. Y no más.
Y aunque a Rojas Díaz Durán, hay algunos despistados, o chayoteros, que lo califican como “mastín”, a mi me parece que ni a pequinés llega este individuo.
Rojas Díaz Durán y otros quisieron ver sangre derramada en la plaza pública y no, no se les hizo, primero, porque Tamaulipas tiene un gobernador que sí es político, que a lo largo del tiempo ha navegado con luz propia, porque no ha sido, como Rojas Díaz Durán, una remora a lo largo de su vida política, y porque México no está para caprichos personales. México está destinado para algo grande, muy grande, que les permita alcanzar otro nivel de vida a nuestras futuras generaciones, y lo que al día de hoy nos ha faltado son verdaderos liderazgos nacionales. Pero la cosa podría cambiar mañana.
1. Por cierto, en conferencia de prensa ofrecida ayer lunes por el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, en Palacio de Gobierno, aseguró que la coordinación entre el Gobierno del Estado, Fuerzas Federales y la Sociedad Civil, así como el desarrollo de infraestructura de Seguridad Pública y el reclutamiento policial, nos han permitido -a Tamaulipas- reducir los índices delictivos en los últimos años, hasta ubicarse la entidad en el lugar 25 a nivel nacional, de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Y es que venir de los niveles más bajos en el entorno nacional -Tamaulipas- con los indicadores más bajos, y llegar hasta donde hemos llegado, es digno de reconocer y aplaudir. El propio mandatario tamaulipeco así lo reconoció, aunque también dijo que aún falta mucho por hacer. Pero no podemos perder de vista que hoy Tamaulipas ha avanzado varios honrosos lugares en distintos indicadores: turismo, atracción de Inversión Extranjera Directa, y un avance muy importante en seguridad pública, al indicar las estadísticas que en Tamaulipas ha disminuido la incidencia en más de una decena de delitos de alto impacto.
Y en ello, ha jugado un papel fundamental el haber diseñado una estrategia inteligente por parte del mandatario tamaulipeco, quien entre otras cosas destacó el entendimiento entre las 6 Mesas Ciudadanas de Seguridad y Justicia, y el Gobierno del Estado de Tamaulipas, relación que dijo “es ejemplo nacional”.
Pero lo más importante es que los datos que destacan el avance de Tamaulipas en seguridad pública, son datos generador por el propio Gobierno Federal, son datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y que coinciden con los datos del propio Gobierno de Tamaulipas.
Entre otros resultados, destaca que de agosto de 2019 a julio de 2020, disminuyó el homicidio doloso, 11 por ciento; el secuestro, 90 por ciento; la extorsión, 66 por ciento; el robo de vehículo, 31 por ciento; el robo a casa habitación 50 por ciento; el robo a negocio, 34 por ciento; el robo a transeúnte, 86 por ciento; la violación, 47 por ciento; la violencia familiar, 30 por ciento; y las lesiones dolosas, 31 por ciento y la trata de personas disminuyó 100 por ciento, al tiempo que no existen casos de robo de transporte de carga, y los feminicidios, se han mantenido sin variación.
Asimismo, en el tema de seguridad también ha ayudado que el Gobierno de Tamaulipas ha invertido recursos muy importantes en infraestructura: construyó un Complejo de Seguridad Pública en Camargo y edifica otros 4 en Reynosa, Altamira, Nuevo Laredo y amplía el de Victoria, así como el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C-5) en Reynosa.
También, fortalece la innovación tecnológica con la instalación de 4 mil 600 cámaras de videovigilancia, 191 kilómetros de fibra óptica en Tampico, Ciudad Madero, Altamira y Reynosa, la red inalámbrica para interconectar y comunicar al Estado y el mejoramiento del sistema de despacho y atención de llamadas de emergencia. Además, el proyecto de Estaciones TAM, distribuidas a lo largo de las carreteras tamaulipecas, ya cuenta con 10 estaciones funcionales en una primera etapa; 5 en construcción y 7 pendientes para el inicio de sus obras, en una segunda etapa.
También, le comparto dos datos que le van a permitir entender la evolución de Tamaulipas en el tema de seguridad: mientras que en 2016, el Estado de Fuerza de las instituciones de Seguridad Pública y Procuración de Justicia estaban conformadas por tan sólo 2 mil 552 elementos, en esta administración creció un 86 por ciento, con lo que Tamaulipas al día de hoy suma 4 mil 662 elementos. Y este ha sido un enorme reto, primero de captación, después de capacitación y finalmente de operación y de asignaciones presupuestales. Y el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca sabe bien que no hay de otra. El reto era combatir a los grupos de la delincuencia organizada, con mano firme, con resultados, y que Tamaulipas recuperara la tranquilidad de los ciudadanos. Y, dados los números y la circunstancia de vida, estoy convencido que vamos por el camino correcto.
Pero sin duda, la cereza del pastel, es la puesta en marcha el Grupo de Operaciones Especiales de Seguridad Pública, GOPES, integrado por 150 elementos altamente capacitados y especializados, 3 helicópteros Robinson 66 con cámaras térmicas, drones para misiones de reconocimiento y seguimiento, binomios caninos y 25 vehículos blindados, que son capaces de entrarle a grandes retos en materia de seguridad, reitero, para devolvernos la tranquilidad a los tamaulipecos.
Y es que un estado con problemas de inseguridad es un estado sin captación de inversiones -nacionales y extranjeras-, sin progreso, sin turismo, sin viabilidad y sin futuro. Y hoy, Tamaulipas, gracias a las estrategias ganadoras de esta administración estatal, ofrece a los tamaulipecos mejores horizontes de desarrollo y mejor calidad de vida.
2. Como dicen en mi pueblo, si no la controla que no la fume. Y esto viene a colación por la frase dominguera que se aventó ayer el vicecoordinador del Partido del Trabajo y aspirante a la presidencia de la Cámara de Diputados, “el compañero diputado” Gerardo Fernández Noroña, quien acusó que le robaron ese cargo, pero dijo que le basta con saber que es “el presidente de la Cámara de Diputados en ‘el corazón del pueblo de México”.
Y fue más allá Fernández Noroña, al sentenciar sobre el PRI: “asesinaron a su candidato a la Presidencia en 1994, Luis Donaldo Colosio; asesinaron a su líder a la Cámara de Diputados, -Francisco- Ruiz Massieu el mismo año; son una pandilla de asesinos. ¿Qué pasaría si nos meten en una crisis política de ese tamaño? ¿Quién asume la Presidencia temporalmente? Nosotros no estamos buscando una ambición vulgar, estamos defendiendo el Movimiento, estamos defendiendo la Cuarta Transformación”.
Y sin pensarlo dos veces, Fernández Noroña se fue contra el propio Andrés Manuel López Obrador, al asegurar que “nuestro compañero presidente, es un ser humano y también se equivoca; y hoy se está equivocando. Es un error entregarle al PRI la Mesa Directiva, es una irresponsabilidad”, dijo Fernández Noroña.
Y después de esta escenita del petista, yo no sé quién está más chisqueado: si Fernández Noroña o Rojas Díaz Durán. Pero de que entre ambos se dan un entre, claro que se lo dan.
3. Y conste que no lo dije yo. El Banco de México prevé que la economía mexicana se contraiga hasta un 12.8 por ciento en 2020, en medio de la pandemia global del coronavirus, la incertidumbre sobre su duración y una mala estrategia por parte del Gobierno Federal. O lo que es lo mismo, para diciembre Santa Clause y los Reyes Magos habrán aplicado la máxima de más vale una graciosa huida que una apasionada entrega. ¿No lo cree? Y si este año, y sin pandemia todavía, la cuesta de enero se fue de enero a marzo, la cuesta del 2021 podrá durarnos hasta junio. Ojalá y no, pero así parece que será.
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