Un instante de Reflexión
Por: Margarita Ramírez HMSP

¿Cuánto cuesta realizar un aborto? Todo depende de si es en el sector público, privado o en la clandestinidad. El costo puede ser desde $ 2,800 a $ 9,700, en clínicas del Sector Salud de la Ciudad de México, dependiendo del tiempo de gestación que tiene la mujer solicitante; por supuesto que en el sector privado el costo de un aborto eleva, consederando la zona en las que se encuentre ubicada la clínica y, como hemos dicho, varían de acuerdo al periodo de gestación; aunque de manera objetiva podemos decir que en la mayoría de los centros abortistas practican lo practican hasta las 24 semanas.

La ley del aborto en México entró en vigor el 24 de abril del 2007, con las llamadas reformas que permiten la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) hasta las 12 semanas de gestación en la Ciudad de México. Pues bien, para el 28 de febrero del 2013 se habían practicado 95 mil 925 abortos según datos del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), solamente en las clínicas públicas, sin contar los que se realizan en el sector privado y en la clandestinidad; dichas cifras aumentaron a 98,228 más en el periodo 2013-2018, sin contar lo que va de 2019. El 97.66% de mujeres son de CDMX y el resto de los estados aledaños. Según la Secretaría de Salud las mujeres que han abortado en su mayoría tienen entre 18-24 años, le siguen mujeres entre 24-29 años y en menos cantidad del 30-34.

Como podemos ver el número de abortos en ningún momento disminuyeron, por el contrario. Es evidente que la urgencia de legalizar el aborto tiene, entre otros fines el factor económico. Eso sin mencionar la ganancia que genera el aborto a las empresas farmacéuticas que producen medicamento y todo aquello que tiene fin la anticoncepción –pastillas, inyecciones, preservativos- además de toda la maquinaria que se utiliza en un aborto -cánulas, aspiradoras…- y demás accesorios. Actualmente la llamada pastilla del día después se vende entre 60 a 100 pesos mexicanos; mientras las pastillas para inducir a un aborto desde la tercera semana van de los $ 2,500 a $ 4,000 pesos, dependiendo del tiempo de embarazo.

Más aún: ¿Qué hacen las clínicas abortistas con los cuerpos de los niños abortados? Oficialmente no se dice nada; bien se sabe que desde la II Guerra Mundial la experimentación humana se realiza con menos conciencia y respeto por la vida humana. Este punto es muy interesante y, aun que casi nadie dice nada al respecto, un informe emitido por la Comisión de Investigación del Congreso de Estados Unidos ha demostrado que Planned Parenthood, la empresa abortista más grande del mundo, lucra con la venta de los órganos procedentes de los cadáveres de los bebés abortados; por su parte Marjorie Dannenfelser, líder provida, afirma que “la industria del aborto vende corazones, hígados, cerebros, manos y otros órganos a una empresa intermediaria dentro de sus instalaciones”.

Aquí una página: www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia… En la que encontrarás un artículo de Juan Francisco Jiménez Jacinto en el que cita el estudio realizado por la Dra. Theresa Deisher fisióloga molecular y celular, cuyo trabajo está reconocido internacionalmente como experta en medicina regenerativa; en dicho artículo explica que los cuerpos de niños no nacidos son tan cotizados y utilizados para regenerar tejido del corazón, riñón, cerebro… de otros seres humanos.

En aborto es un verdadero negocio que le conviene sólo a los mercedarios de este sector; es parte de la cultura de la muerte que involucran a la madre, el padre, los médicos que traicionan su promesa de resguardar la vida y, a los diputados y legisladores que lanzan sofismos -mentiras maquilladas con apariencia de verdad- con los que defienden este cruel asesinato, llamándole derechos de la mujer, para tranquilizar la conciencia de una sociedad cada vez más light.

El aborto mata la paz del mundo… Es el peor enemigo de la paz, porque si una madre es capaz de destruir a su propio hijo, ¿qué me impide matarte? ¿Qué te impide matarme? Ya no queda ningún impedimento. Santa Teresa de Calcuta.